viernes, 24 de abril de 2009

LA FAMILIA ANTE LOS CELOS INFANTILES:PAUTAS Y ORIENTACIONES

LA FAMILIA ANTE LOS CELOS INFANTILES: PAUTAS Y ORIENTACIONES


¿ QUÉ SON LOS CELOS?

Los celos, son un estado afectivo caracterizado por el miedo a perder o ver reducidos el cariño y la atención de alguien querido. En un sentido estricto, se entiende, como el sentimiento producido por el temor de que la persona amada prefiera a otra; frecuentemente, este sentimiento va acompañado de envidia - resentimiento hacia quien se percibe como rival.

La persona que siente celos percibe la realidad algo distorsionada; considera que es menos querida que antes, parece tener un radar que le trae a la memoria lo que le produce angustia,
Suelen ser personas sensibles, y esta sensibilidad puede dar lugar a manifestaciones orgánicas


1. LA RIVALIDAD ENTRE HERMANOS.

Las disputas entre hermanos es algo natural e inevitable. En toda relación fraterna conviven íntima e ineludiblemente instintos agresivos y amorosos. A medida que los hermanos se hacen mayores, la rivalidad va superándose dando paso a una mayor unión y amistad.


En general, si los padres procuran hacerlo bien, conseguirán que los episodios de celos y envidias den paso a una relación de amistad, colaboración y ayuda mutuas. Del buen clima familiar dependerá la estrecha comunicación y relación entre hermanos, y de forma simultánea, ésta repercutirá así mismo en el clima familiar.

Con frecuencia los hermanos suelen tener dificultades a la hora de compartir los objetos y cosas que cada uno tiene. En la primera etapa del niño(de 0 a 6 años) de Educación Infantil, éste se halla sumido en un egocentrismo que le hace sentirse el centro del universo. Es propio de esta etapa repetir constantemente "esto es mío". Ante este sentido tan arraigado de la posesión, hay que enseñarles a respetar las cosas de sus hermanos, a pedirlas por favor, a dejar sus cosas, a ser generosos e incluso a ser positivos despertando en ellos la capacidad de admirar a los demás comunicándoselo. Así mismo, será necesario reforzar y alabar las acciones que conlleven los valores antes mencionados.

Elogiar sus actos de generosidad y amistad y evitar comparaciones previene las envidias y los celos. Hacer que cada hijo sea protagonista en la familia es promover su seguridad personal, autoestima y desarrollo de una personalidad equilibrada.

A lo largo de la vida familiar, van a surgir conflictos por la posesión o uso de cualquier cosa, por cualquier nimiedad a veces; las disputas que no brotan del odio sino de discusiones momentáneas y que se resuelven rápidamente sin que intervenga el adulto son muy beneficiosas, siempre y cuando ninguno de los hermanos se instaure en tirano del otro. La inhibición de la rivalidad y su represión inconsciente tienen efectos nefastos sobre el desarrollo afectivo e intelectual. La superación de estas rencillas les prepara para su posterior adaptación a la sociedad (no siempre acogedora), les hace tener en cuenta el punto de vista de los demás y salir poco a poco de su egocentrismo. Es también prueba de que el niño va adquiriendo seguridad en sí mismo, afirmación y en definitiva, desarrollando su personalidad.

Así pues, de la relación entre hermanos, los hijos tendrán la oportunidad de aprender los modos de convivir con los demás, a salir de sí mismos para abrirse a nuevos núcleos o ámbitos, a buscar y hallar nuevas amistades y vínculos afectivos.




Estrategias para prevenir y resolver los conflictos entre hermanos:

§ El clima familiar es muy importante; si predomina el amor y la confianza, éstos darán lugar a un mejor entendimiento entre todos y es el mejor antídoto contra los celos.
§ Conviene propiciar afecto y compartir con los hijos todos los acontecimientos haciéndoles partícipes de proyectos comunes, ilusiones, valores de la propia familia. Si se estimula la expresión sincera de sentimientos y emociones, se liberan miedos, tristezas...
§ Es muy conveniente habituarles a compartir las responsabilidades diarias. Es necesario propiciar actividades en las que colaboren todos. Cada hijo puede ayudar al otro en lo que sabe o puede hacer, participando en la misma tarea.
§ Promover juegos donde tomen parte todos (juegos de mesa, de calle, prendas...). También realizar excursiones y viajes; es decir "hacer familia".
§ Favorecer las tertulias y sobremesas donde se comentan anécdotas, historias familiares y donde se da la oportunidad de participar a todos los hijos.
§ Enseñarles a pedir las cosas por favor, a dar las gracias, y a pedir perdón, muy necesario.
§ Autoridad en la familia que por una parte proteja, oriente, ayude y estimule, y por otra parte que exija límites claros y adecuados. En definitiva, darles la seguridad de que son amados pero con la exigencia de que aporten a los demás.



a) Lectura del cuestionario.
b) Responder SI o NO conjuntamente madre y padre tras una breve reflexión de cada punto.


REGISTRO DE CONDUCTAS
SI NO

1. Conductas que manifiesta el niño o la niña en la relación con sus padres.

§ Muestra agresividad hacia su madre.


§ Se muestra agresivo con su padre.


§ Cuando se le abraza o se le manifiesta cariño, suele responder con rechazo.


§ Busca el afecto de modo exagerado.


2. Conductas que manifiesta el niño o la niña en la relación con los hermanos:

§ Se manifiesta de forma más agresiva de lo normal.


§ Expresa frases que indican rechazo o rivalidad hacia el hermano o hermana: "No quiero que venga conmigo", " que se quite ese de ahí",...


§ Se ha vuelto más burlón con sus hermanos


§ A menudo "delata". Se ha vuelto un "acusica".


§ Habitualmente se compara con ellos y se siente peor tratado.


§ A la hora de jugar, se niega sistemáticamente a compartir sus cosas.


§ Rompe y descuida el material (juguetes, juegos, material escolar,...) de los hermanos.


§ En ocasiones busca su compañía pero para molestarles y fastidiarles.


§ Tiende a aislarse.


§ De un tiempo a esta parte, no le gusta hablar de sus hermanos; parece que rechaza los comentarios referidos a ellos.


3. Conductas que manifiesta el niño o la niña con sus amigos y amigas:

§ Se muestra más agresivo de lo habitual con amigos y/o compañeros.


§ Les suele hacer burla, se mofa, realiza comentarios despectivos.


§ Les acusa ante otras personas.


§ Hace un tiempo que se compara con ellos y se siente peor tratado.


§ Últimamente se niega a compartir sus cosas.


§ Rompe o descuida las cosas de los demás (antes no lo hacía).


§ En ocasiones busca su compañía pero para molestarles e importunarles.


§ De un tiempo a esta parte tiende a aislarse y a no compartir los momentos de juego.


§ Parece que está en su mundo, ausente.


§ Se muestra más sensible, susceptible e irascible.


4. Conductas relacionadas con el entorno escolar:

§ El profesorado comenta que el hijo o la hija se muestra más airado con ellos, contesta de forma brusca y se manifiesta de forma rebelde y desafiante...


§ Ultimamente deja de hacer sus tareas escolares.


§ En el colegio nos dicen que llama la atención en clase.


§ Sus calificaciones académicas han sufrido un bajón sin causa aparente.


§ Parece que ha perdido interés por el estudio; evade los
comentarios acerca del colegio,


5. Conductas referidas a los hábitos alimentarios del niño o de la niña.

§ Pide que le den de comer a la boca cuando ya comía solo.


§ Quiere comer lo mismo que su hermano (bebé).


§ Rechaza alimentos que ya ingería o aceptaba.


§ En ocasiones amenaza con vomitar.


§ En situaciones concretas llega a vomitar.


6. Conductas relacionadas con el control de esfínteres del niño o de la niña:

§ Ha vuelto a mojar la cama por las noches.


§ En alguna ocasión se ha hecho pis durante el día.


§ En alguna ocasión se ha hecho cacas durante el día.


7. Conductas referidas a su estado emocional:

§ Ultimamente llora por cualquier cosa.


§ Se enfada con facilidad.


§ Se le ve más nervioso que antes.


§ En ocasiones se le ve triste, con apatía, sin ilusión.


§ Se muestra muy sensible y susceptible (da mucha importancia a cosas insignificantes)


§ Manifiesta que no desea crecer.


§ Tiene mucho miedo por la noche (habla de fantasmas, monstruos, personajes fantásticos)


§ Tiene miedo a los lugares oscuros de casa, del colegio, de la calle.


· Se niega a estar solo durante el día.


§ Muestra temor a algunos animales(aunque sean conocidos e inofensivos).


§ Teme a lo desconocido, bien sea personas, cosas o situaciones.


§ Desea dormir con sus padres aduciendo miedos(ya dormía solo).


Otros miedos. Descríbelos a continuación:


8. Conductas referidas a la responsabilidad.

§ Se niega a colaborar en las tareas de casa.


§ No se niega, pero no asume las responsabilidades que le asignan.


§ Busca privilegios, pero rehuye sus obligaciones.


§ No acepta ni cumple las normas establecidas en casa.


9. Conductas relacionadas con el sueño.

§ Se despierta por la noche con cualquier pretexto(pide agua, ir al baño)


§ No se le hace hora de ir a dormir(antes iba a su hora).


· Pide ir a la cama de sus padres porque dice que duerme mejor.


§ Pide que duerman(el padre o la madre) en su cama.





PAUTAS DE INTERVENCIÓN.

A continuación presentamos una serie de consejos que eviten la aparición y/o mantenimiento de conductas celosas dentro de la familia.

Evitar: (en la medida de lo posible)
· Los gritos y las descalificaciones.
· Las atenciones y dedicación excesivas.
· Privilegios a unos hijos frente a otros.
· Comparaciones entre los diferentes hijos.
· Intromisiones en los conflictos de los hijos y tomar partido en ellos (siempre que no haya agresión).
· Atenciones y recompensas al "chivato".
· Comentarios de vecinos, amigos y familiares haciendo comparaciones de vuestros hijos.
· Un trato irónico, o risa y burla ante conductas inadecuadas.
· Que el hijo mayor deba asumir en todo momento la responsabilidad del cuidado del hermano menor.
· La competitividad entre hermanos.
· Tomar en cuenta las conductas propias de bebé (impropias de la edad).


¿Qué debemos hacer?.

Procurar realizar las conductas que exponemos a continuación:
-Intentar cambiar lo menos posible la rutina del niño tras el nacimiento del hermano.

En distintos estudios se ha comprobado que disminuye considerablemente el volumen de atención que recibe el primogénito al tiempo que cambia su rutina tras el nacimiento.Esto afecta mucho al niño/a, por lo tanto procurar controlar su tiempo especial, los ritos para acostarse, seguir diciendole lo mismo sobre lo que está permitido y lo que no...

·Hablar de "igual a igual" con el primogénito
la rivalidad suele disminuir cuando la madre habla con el primogénito de igual a igual respecto al bebé.Comentar lo que el bebé puede sentir o necesitar llamar la atención del niño ante el interes del bebé por él, hacia lo que le gusta y lo que no...

·No hacer comparaciones

· Prestar atención al mayor y hacer que lo hagan los demás
Dedicad al dia un tiempo exclusivo para el niño, de 10 a 15 minutos.El niño puede esperar este tiempo y confiar en él.

· No "pasarle" todo al pequeño
Muchas veces el pequeño se aprovecha.Puede molestar al mayor destruyendo sus realizaciones y este reaccionar con violencia.No reprender muy fuertemente al mayor no consolar mimosamente al pequelo, reñir al pequeño suavemente para que sea más cuidadoso y ayudar al mayor a rehacer su construcción.

§ Fomentar la cooperación entre los hermanos. ( en las tareas de la casa, recados, en situaciones de juego ..)

§ Observar y reflexionar sobre las conductas celosas de nuestros hijos y reaccionar sin darles excesiva importancia.

§ Tratar con afecto y atención frecuentes a tus hijos para que perciban que son queridos.

§ Favorecer el juego con todos los hijos (para lograr una mayor armonía entre los hermanos).

§ Promover un clima de sosiego y tranquilidad en todos los momentos posibles.

§ Analizar entre los adultos las causas posibles de los celos y las distintas soluciones.

§ Educar a los hijos en el control de sus emociones: aprender a soportar pequeñas frustraciones, alegrarse del éxito de los demás, responder con tranquilidad ante situaciones adversas, enseñarle a aceptar sus incapacidades y dificultades con optimismo.

§ Respetar la autoridad de los padres y admitir los límites establecidos en la familia. Conseguir que se acepten las normas de casa de forma democrática. Resulta necesario conseguir que se respeten aquellas normas que la unidad familiar estime imprescindibles. No obstante, si algún hijo se rebela, conviene que los padres expliciten los límites de la convivencia familiar.

§ Respetar el espacio de juego e intimidad de cada hijo.

§ Estimular a los hijos para que expresen lo que sienten con libertad y puedan compartir tristezas y alegrías.

§ Estimular a los hijos y darles seguridad.


Consejos y orientaciones para las familias ante la llegada de un nuevo hermano u hermana:
· Hacer partícipe a los hijos de las tareas que conlleva la llegada de su hermano: - Preparar la cuna y habitación, adquirir la ropa...
- Valorar a los hijos tras la realización de estas tareas; más por la actitud que manifiestan que por el resultado final.
· Resaltar la importancia de tener hermanos y de la felicidad que esto comporta en el juego, en las labores diarias, en la alegría de la casa y de las reuniones familiares...
· Advertir a los familiares que en las visitas que nos realicen eviten expresiones del tipo: "ahora si que vas a tener que compartir", o "ya sabes, lo tendrás que cuidar porque el niño será muy pequeño y tu ya eres mayor" etc...
· Así mismo incitarles a que sus expresiones hagan alusión a aspectos positivos referidos al nuevo hermano: "te vas a divertir mucho", "con un hermano vas a poder jugar cuando se haga un poco más grande" etc. ..
· Debemos evitar la coincidencia de llevar al mayor a una escuela infantil cuando nace otro/a hermano/a. Es preferible adelantar o retrasar esta entrada para que no asocie: nace mi hermano = salgo de casa.



Tras el nacimiento de un nuevo hermano:

· Evitar frases que recriminen sus acciones: "No lo toques", "Aléjate que no me fío de ti", "Que se te va a caer"..
· Estimular con expresiones positivas todo acercamiento: "Qué bien lo cuidas" "Eres muy responsable", "Ven que lo vas a bañar muy bien".
· Involucrar a los hermanos en las tareas de cuidado, higiene, alimentación etc.
· Buscar espacios para atender de forma preferente a los hermanos en el momento del nacimiento del nuevo bebé y en el período posterior. Las personas adultas solemos dirigirnos rápida y casi exclusivamente al recién nacido, relegando la atención a los demás hermanos; sin embargo, son éstos los que pueden manifestar conductas celosas y no el recién nacido que no es consciente del momento.El mayor si es consciente el pequeño no lo es.
· Procurar dar afecto a los hijos sin distinción de edad. En nuestra sociedad solemos prestar excesiva preferencia afectiva al niño pequeño omitiendo de forma bastante brusca e inconsciente la atención a los hermanos mayores.
· Valorar a nuestros hijos delante de familiares y visitas, tratando de omitir todo comentario negativo sobre ellos.


. CONCLUSIONES.

En la mayoría de las situaciones en las que se detectan conductas celosas, éstas pueden considerarse como manifestaciones naturales, respuestas propias de la edad y debemos entender la aparición de estos "miedos" como un proceso de adaptación y maduración en la evolución normal de los niños y niñas.

Una vez identificadas en el hogar conductas celosas entre los hijos,

Si los padres transmiten seguridad y afecto, los celos irán dando paso a una relación amistosa entre hermanos. La cooperación de todos y un clima familiar donde se dan oportunidades para participar, contribuirá a que la rivalidad entre hermanos vaya disminuyendo progresivamente.( la estrategia de la Reunión Familiar se encuentra resumida en otro articulo de este blog)

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